Sin mea culpa
Me escribe Óscar Mangas al hilo de mi post Mayoría y cercanía, hablando de cómo el diseño digital ha sido (hemos sido) cómplice necesario en el desplazamiento de la gente mayor en los temas financieros. Siento que tiene tanta razón que hago mías sus palabras:
Me ha sorprendido la falta de mea culpa del mundillo con el tema del trato de la banca a nuestros mayores. Todos hemos participado (y aplaudido) ese proceso. Nos parecía genial reducir una interacción tradicionalmente humana a un único tap en el móvil. ¿Que alguien no entiende el cajero automático? Se hace la fuente más grande y listo. Hemos confundido churras con merinas. Y nos hemos quedado tan panchos mientras Negocio nos comía la tarta. Ahí la llevamos.